Sistema de Información Geográfico GIS Smallword 4

Adinelsa, empresa administradora de infraestructura eléctrica, celebra 27 años de trayectoria llevando el servicio elemental de la energía eléctrica a los habitantes de las zonas más alejadas y de difícil acceso en la sierra de Lima, norte de Arequipa, sur de Ayacucho y Huancavelica.

En medio de un nuevo aniversario y con la pandemia a cuestas, la empresa ha sabido adaptarse a los nuevos escenarios. En ese sentido, se destaca la continuidad de las labores del personal de manera remota, la implementación del sistema de trámite documentario que permitió procesos más eficientes y la obtención de la certificación ISO 9001 de la Gestión del Proceso de Facturación para la Emisión de Recibos de Suministro Eléctrico en Zonas Rurales.

En poco tiempo, Adinelsa ha logrado buenos indicadores de gestión interna y satisfacción; no obstante, reconoce que aún existen retos por superar para continuar optimizando el servicio de suministro de energía eléctrica y la atención al cliente, acorde a los estándares exigidos por la Norma Técnica de Calidad de los Servicios Eléctricos Rurales (NTCSER).

El gerente general Juan Carlos Febres afirma que, en los últimos 4 años, se ha implementado mejoras como la adecuación del Sistema Comercial y Técnico SIELSE, logrando la correlación entre ambos para manejar eficazmente la data comercial y técnica de la empresa.

A la par, resalta la incorporación y actualización del Sistema de Información Geográfica GIS Smallword, que le permite gestionar información geográfica de los elementos de la red eléctrica y disponer de la data de los sistemas de distribución y transmisión, sistemas fotovoltaicos domiciliarios, sistemas de utilización de redes de terceros y suministros.

Precisa el funcionario que la plataforma GIS es un elemento importante y elemental que permite a Adinelsa mantener el control y supervisión de las operaciones, y la gestión del mantenimiento de activos con un software avanzado.

Atención al usuario

En cumplimiento con la NTCSER, Adinelsa ha dispuesto nuevas oficinas de atención ubicadas estratégicamente para acercarse aún más al usuario final, a fin de gestionar las consultas, reclamos y demás trámites.

De esta manera, Juan Carlos Febres especifica que, en lo que va del 2021, se cuenta con nueve centros de atención al cliente, los cuales se sitúan en las localidades de Cora Cora, Yauyos, Antioquia, Cajatambo, Relave, Huancano, Canta, San Jerónimo y una oficina en Cajamarca para clientes fotovoltaicos. 

Además, revela que se dispone de una oficina móvil por cada sistema operativo, es decir, existen 4 oficinas itinerantes, que, de acuerdo a un cronograma, visitan a diferentes localidades de sus concesiones para absolver los requerimientos de los clientes sobre su facturación y realizar inspecciones menores.

Alumbrado público

Otra de las obras tangibles de Adinelsa ha sido la modernización del parque de alumbrado público. En el pasado, los postes tenían luminarias de vapor de sodio que contaban con múltiples componentes y que implicaban un alto costo en mantenimiento y reparación. El reemplazo por luminarias LED hizo posible un mejor servicio de alumbrado y menores costos.

“Las luminarias LED cuentan con un solo componente y la durabilidad es 3 o 4 veces superior. Con ello, podemos ofrecer una mejor calidad en el servicio de alumbrado público y desembolsar menores sumas de dinero para labores de mantenimiento en estas tecnologías”, profundiza Juan Carlos Febres.

Sistemas fotovoltaicos

Otra de las incursiones de Adinelsa es la administración de un parque de sistemas fotovoltaicos domiciliarios instalados por el Estado en zonas donde la red eléctrica no puede llegar por las condiciones atmosféricas o características propias del terreno.

En esa apuesta, actualmente se encuentran operativos 10,000 sistemas de energía solar para hogares rurales y se proyecta que la cifra crezca en los próximos años a medida que se reciban las adquisiciones de kits solares procedentes del extranjero.

“Los kits de energía solar están valorizados en S/ 5.5 millones y llegarán en enero del 2021. Con ello, podremos mantener en operación a 3,000 sistemas fotovoltaicos adicionales y el resto del stock se usará para el reemplazo de componentes con el propósito de evitar fallas del servicio en el futuro”, explica.

Ritmo de rentabilidad

Pese a la coyuntura, el 2021 ha sido un año de cifras azules para Adinelsa. Sus ingresos mejoraron más de 10% respecto del año anterior, debido al incremento de la venta de energía por un mayor consumo de los clientes residenciales e industriales (minería y agricultura), y el buen índice de cumplimiento de pagos de los recibos de servicio eléctrico.

“En este punto, se destaca que el porcentaje de cobrabilidad varía en un rango de 92% a 95% en promedio a nivel de todas sus jurisdicciones; mientras que la morosidad cae a un rango menor de entre 4% y 6%, reportándose mayores retrasos en zonas que cuentan con sistemas fotovoltaicos domiciliarios”, compara el gerente general.

Futuras inversiones

Paralelamente, este año, el presupuesto de inversiones de la empresa ha ascendido a S/ 13.6 millones, ejecutándose una buena parte en las actividades y obras descritas anteriormente. Para el 2022, se cuenta con un presupuesto de S/ 22 millones en nuevos proyectos y se estima invertir cerca de S/ 150 millones en los siguientes años, con la finalidad de mejorar la infraestructura eléctrica.

“Nuestros sistemas eléctricos tienen 25 años de antigüedad y necesitamos cambiarlos para cumplir con la Norma Técnica de Calidad de los Servicios Eléctricos Rurales. Nuestro reto para los próximos años es ejecutar más proyectos de inversión orientados a mejorar el servicio eléctrico para los usuarios finales y la calidad de atención”, enfatiza el funcionario.

Rol distribuidor

De otro lado, el gerente general Juan Carlos Febres adelanta que la organización se prepara para dejar el rol de administrador de infraestructura eléctrica y dedicarse oficialmente a la distribución de energía rural.

Para ello, está en proceso de completar la entrega de todas las instalaciones a las EDEs de FONAFE, lo que culminará entre el 2022 y 2023.

“La actividad de distribución representa hoy el 88% de nuestros ingresos totales, mientras que la de administración solo un 12%. Así que, una vez que transfiramos toda la infraestructura a Fonafe, que será entre el próximo y subsiguiente año, nos centraremos exclusivamente en la distribución de energía eléctrica en las zonas rurales donde operamos”, sostiene.